En una cultura contemporánea en la que las tendenias musicales populares dejan mucho que desear y cuyo impacto desgraciadamente se ve reflejado en la niñez y adolescencia actual, es refrescante ver a un niño de 11 años improvisar temas de Van Halen junto a una banda de Glam en pleno escenario.
Aidan Fisher, un niño norteamericano, el pasado 19 de diciembre demostró su sobrio manejo del instrumento en un concierto de la banda de heavy metal Steel Panther, dejando anodadados a todos los integrantes de la agrupación y transmitiendo poder y energía a todo el público presente con su interpretación.
Esta situación tan peculiar surgió a partir un cartel que Aidan sostenía en pleno concierto y que rezaba: "SATCHEL, TE RETO CON UN SOLO DE GUITARRRA" Satchel, guitarrista principal de Steel Panther, aceptó el desafío del prepúber y lo invitó a la tarima donde el público presente se llevó el mejor momento de la presentación de la agrupación norteamericana.
Da gusto ver este tipo de despliegues de talento por parte de las nuevas generaciones. Sí, en medio de la canción el niño se pierde un poco, sí, interpreta todos los temas sentado, y sí, nunca demuestra una sonrisa. Pero eso hace más valiosa la interpretación, porque esos aspectos son características indiscutibles de lo espontaneo del momento. Además, es un niño de 11 años que no tiene un grupo de marketing programándole desde como vestir hasta como ir al baño para poder vender un talento prefabricado.
Bien por los padres de Aidan, que se merecen total reconocimiento por saber guíar el talento de su hijo hacia formas de artes constructivas.Ojalá que todos los padres y madres fueran así, especialmente en nuestra cultura plagada de tanta basura en los medios de comunicación.