Para abordar este nuevo trabajo de la agrupación inglesa de metal vampírico, debo mencionar el precedente que establecieron en el penúltimo tema de del álbum Manticore... (2012), en la pista que cierra la participación de la banda, Sucumb to this, los ingleses añaden por primera vez de manera genial el canto limpio de voces masculinas en una dirección musical que encajaba perfectamente con estilo de la agrupación.
Es más, todos los temas anteriores fueron una simple antesala para esos 10 segundos magistrales. 10 segundos que mostraban un recurso que podía mejorar en gran medida la individualidad de los trabajos de la banda, ya que si bien hasta esa fecha no fueron trabajos en los que faltara musicalidad o alta calidad en la producción, no mostraron nada enteramente novedoso desde el Midiam, trabajo que plasmó los últimos peldaños en la progresión de sonido de la banda y que permitió el desarrollo del estilo vocal actual de Dani Filth, quien si bien no ha bajado su calidad en estudio desde entonces, tampoco ha mostrado nada nuevo en esa área.
Voy a que Dani Filth tuvo la oprtunidad que hacer un gran álbum, regresar a COF a su época dorada, pudo refrescar completamente el sonido de la banda (hecho que hubiera sido coherente con la renovación del 60% de la alineación) y dejó pasar la oportunidad.
En vez de eso tenemos un trabajo muy sólido, con mucha cohesión que retoma las bases de los grandes discos de la banda y que añade la participación acertada y novedosa de arreglos psicodélicos y electrónicos de teclado a lo largo de la obra, aspecto más rescatable desde el punto de vista creativo. Es un disco muy bien secuenciado en el que cada tema es memorable y la ejecución de todos los instrumentos está a la altura de lo que la banda ha brindado anteriormente.
Sin embargo me queda la pica de que este Hammer Of The Witches pudo ser grandioso. Un {abum muy digerible, interesante, bien recibido, que muestra los aspectos más notables de Cof y que entra en la lista de lo mejor del 2015. Vamos con el análisis del álbum:
El álbum abre con el intro instrumental Walpurgis Eve que brinda desde el vamos, atmósfera cinematográfica al escucha, le sigue Yours Inmortaly, tema que muestra sonoramente la nueva alineación, en especial el acertado acoplamiento de Lindsay Schoolcraf en las teclas y brindándonos un abre boca del resto de la obra y un hermoso arreglo vocal en el coro de la pista, ya con eso está pagado lo invertido en el álbum. Enshrined in Crematoria aparece para mantener la intensidad establecida e minutos anteriores hasta que nos topamos con un título, que más que el nombre de una canción suena a una declaración de principios y filosofía de vida: Deflowering the Maidenhead, Displesuring the Goddess, !qué tema tan poderoso y brutal! en este punto los Cof rescatan lírica y musicalmente sus raíces de la mejor manera posible. A estas alturas entramos en el tema "romántico" del disco, Blackest Magic in Practice, tema que despliega el lado más melódico de Cof y que cumple la función de bajar las revoluciones y reconfortar con su dulce estructura, en este momento el álbum toma forma y los demás temas resultan complementarios. Hammer of the Witches aparece después de Monstruos Sabbat, tema instrumental que sirve de transición entre los medios tiempos melódicos de Blackest Magic... y la intensidad instrumental que regresa con el primer sencillo y video clip del álbum: Right Wing of the Garden Triptych. Vampire at my Side, resulta recordable por su uso acertado de guitarras acústicas y finalmente llegamos a Onward Crhistian Soldiers, pista que cierra de manera excelente la participación de la banda y que refuerza la dirección musical basada en un par de guitarras que destacan a lo largo del disco por su dinamismo, lo surtido en sus riffs y la habilidad de sus ejecutantes para complementarse eficientemente, solos de gran calidad, un Martin Skarupka que sigue siendo un pulpo en la percusión, y un Daniel Firth que si bien cumple a cabalidad su trabajo en las cuerdas gruesas, no tiene los suficientes pasajes protagónicos a lo largo del disco, hecho que le resta musicalidad al Sentencia de las Brujas. Blooding te Hounds of Hell, acaba la lista de temas a manera de outro del álbum como obra íntegra.
El álbum además de su formato tradicional en jewel case, tiene un presentación limitada en digipack que cuenta con 2 pistas adicionales originales, las cuales hubiera gradecido que viniera en un cd aparte. En este caso la simpleza y practicidad de añadir 2 temas en el mismo cd, sólo porque hay el espacio suficiente no funciona, porque daña la experiencia del escucha con canciones que no fueron intencionadas para estar en la secuenciación del disco.
El álbum abre con el intro instrumental Walpurgis Eve que brinda desde el vamos, atmósfera cinematográfica al escucha, le sigue Yours Inmortaly, tema que muestra sonoramente la nueva alineación, en especial el acertado acoplamiento de Lindsay Schoolcraf en las teclas y brindándonos un abre boca del resto de la obra y un hermoso arreglo vocal en el coro de la pista, ya con eso está pagado lo invertido en el álbum. Enshrined in Crematoria aparece para mantener la intensidad establecida e minutos anteriores hasta que nos topamos con un título, que más que el nombre de una canción suena a una declaración de principios y filosofía de vida: Deflowering the Maidenhead, Displesuring the Goddess, !qué tema tan poderoso y brutal! en este punto los Cof rescatan lírica y musicalmente sus raíces de la mejor manera posible. A estas alturas entramos en el tema "romántico" del disco, Blackest Magic in Practice, tema que despliega el lado más melódico de Cof y que cumple la función de bajar las revoluciones y reconfortar con su dulce estructura, en este momento el álbum toma forma y los demás temas resultan complementarios. Hammer of the Witches aparece después de Monstruos Sabbat, tema instrumental que sirve de transición entre los medios tiempos melódicos de Blackest Magic... y la intensidad instrumental que regresa con el primer sencillo y video clip del álbum: Right Wing of the Garden Triptych. Vampire at my Side, resulta recordable por su uso acertado de guitarras acústicas y finalmente llegamos a Onward Crhistian Soldiers, pista que cierra de manera excelente la participación de la banda y que refuerza la dirección musical basada en un par de guitarras que destacan a lo largo del disco por su dinamismo, lo surtido en sus riffs y la habilidad de sus ejecutantes para complementarse eficientemente, solos de gran calidad, un Martin Skarupka que sigue siendo un pulpo en la percusión, y un Daniel Firth que si bien cumple a cabalidad su trabajo en las cuerdas gruesas, no tiene los suficientes pasajes protagónicos a lo largo del disco, hecho que le resta musicalidad al Sentencia de las Brujas. Blooding te Hounds of Hell, acaba la lista de temas a manera de outro del álbum como obra íntegra.
El álbum además de su formato tradicional en jewel case, tiene un presentación limitada en digipack que cuenta con 2 pistas adicionales originales, las cuales hubiera gradecido que viniera en un cd aparte. En este caso la simpleza y practicidad de añadir 2 temas en el mismo cd, sólo porque hay el espacio suficiente no funciona, porque daña la experiencia del escucha con canciones que no fueron intencionadas para estar en la secuenciación del disco.