El doom metal no es un género que haya ganado atención dentro de la comercialidad, como lo es el death metal por ejemplo, si asomó por ahí la cabeza para decir: estoy aquí, fue por dos bandas: MY DYING BRIDE y PARADISE LOST, quienes llegaron al HEADBANGERS de MTV en los noventas con algunos sencillos destacables que ampliaron el espectro de alternativas para todos queines estabamos descubriendo música en esas épocas. Ahora todo tipo de información al respecto está a un clik de distancia.
Tampoco es un género que haya evolucionado y que tenga un abanico ámplio de exponentes actualmente, o alguna banda de nueva generación que represente el estilo con gallardía y aplomo. La banda por antonomasia y referente del Doom Metal es MY DYING BRIDE. Sin que esto llegue a sonar excluyente para la agrupación que estoy abordando en esta reseña, que si bien es una de las fundadoras del género, bifurcaron su rumbo y se alejaron mucho del planteamiento que establecieron con álbumes como: Icon y Draconian Times.
En fin, hay que otrorgarles a estos músicos el mérito de mantenerse activos durante casi 30 años, con una discografía extensa, de la cual nos llega este 2015 su trabajo número 14: La plaga Interna. Que frescos y renovados suenan estos tipos despúés de tanto tiempo. Con el riesgo de sonar exagerado, tengo que manisfestar una idea que ronda mi pensamiento desde la primera vez que puse oídos en este material, y es que hasta ahora de los álbumes que se han publicado este 2015 este es el mejor que en lo personal he escuchado, ojo, esa opinión puede cambiar, todavía falta el nuevo de NILE, SLAYER y MEGADETH, ¿algo de METALLICA tal vez? En todo caso, este álbum recoge los mejores aspectos de doom metal clásico y encuentra sinergia con el rock gótico muy propio de la agrupación, en el momento de usar canto limpio para ilustrar los pasajes melancólicos instrumentales.
Un álbum fácil de escuchar y con riqueza musical a borbotones que recuerda la dirección musical de los Rotting Christ en el Sleep of the Angels, es más, el tema de apertura "No hope in sight" suena a Sakis 100% en15 primeros segundos de vocalización, por cierto, gran tema para comenzar un álbum, la banda define desde el principio la temática de la obra: un doom metal bien hecho, bien trabajado en ejecución y produción, la secuenciación y la mezcla del álbum es muy acertada e inteligente.
Cada tema es simplemente una extención natural del anterior, es muy dificil aburrirse o dejar el trabajo a aun lado si eres entusiasta del metal. Los tones y el goliat tienen una afinación muy profunda y consistente, el bajo es coprotagonista del la sección rítmica en todas las canciones, muy contundente, consistente y pesado, perfecto para este tipo de estilo, las guitarras no necesitan una afinación muy baja para sonar densas, aquí con afinación estandar se puede lograr sacar muchas lágrimas con pocos acordes, y ahí viene la definición completa de este trabajo: Sentimiento.
PARADISE LOST demuestra lo que el doom metal clásico estableció desde el inicio del género: que puede ser un estilo muy cercano al espectro más básico de ejecución dentro del metal, algunas veces manteniendo esa mística de repetición y minimalismo, pero que no por eso deja de tener complejidad y consistencia sonora.